Invoca la asistencia del Arcángel Rafael para que te ayude a curar las dolencias.
Primero prepárate física, mental y espiritualmente, luego acondiciona el lugar donde vas a a realizar la oración/invocación.
Imagina un círculo de luz verde brillante, puedes encender una vela verde, un incienso y si es de tu agrado pon música suave que ayude a lograr un estado físico de relajación. Siéntate en el c
Primero prepárate física, mental y espiritualmente, luego acondiciona el lugar donde vas a a realizar la oración/invocación.
Imagina un círculo de luz verde brillante, puedes encender una vela verde, un incienso y si es de tu agrado pon música suave que ayude a lograr un estado físico de relajación. Siéntate en el c
entro de Tu círculo de luz, en una postura cómoda y comienza a relajarte.
Comienza a respirar pausadamente y dirige mentalmente la respiración a través de todo el cuerpo, comenzando a relajar mediante la respiración la cabeza, el cuero cabelludo, los músculos faciales, las mandíbulas, etc. Luego pasas a relajar el cuello, cada una de las vértebras y así sucesivamente con cada parte del cuerpo. Dirige la respiración en la parte interna de tu cuerpo hasta lograr un nivel profundo de relajación.
Cuando estés en estado profundo de relajación, invoca la presencia de Arcángel Rafael y pídele que te sane de toda dolencia.
Oración al Arcángel Rafael:
AMADO ARCÁNGEL RAFAEL, MEDICO DE DIOS, TU QUE FUISTE ENVIADO POR EL PADRE CREADOR A CURAR LOS MALES DE LA HUMANIDAD, TE IMPLORO PARA QUE CURES MIS DOLENCIAS, CÚBREME CON TU AMOROSA PRESENCIA, CON EL PODEROSO MANTO DE LA LUZ, Y LA SALUD PERFECTA.
MI CUERPO FUE CREADO PERFECTO, DEVUÉLVEME LA PERFECTA ACTIVIDAD DE CADA ÓRGANO, DE CADA CÉLULA DE MI CUERPO Y MENTE.
GRACIAS AMADO RAFAEL POR CURARME. AMEN
A continuación visualiza una corriente de energía de luz curativa de Dios y del Arcángel Rafael, una luz brillante, de color verde esmeralda rodeando tu cuerpo y alrededor de cada órgano. Siente como la energía entra a tu corriente sanguínea a cada nervio, llevando la energía de la curación.
Imagina como la luz le inyecta vitalidad y dinamismo a tu sistema inmunológico, siente como los leucocitos se dirigen veloz a curar el órgano enfermo, a esa parte de tu cuerpo que no funciona, según la perfección divina de la Creación.
Visualice como la luz curativa llega hasta la parte enferma y la llena de luz verde, la penetra y la envuelve. Concéntrate en ese órgano que esta enfermo, llénelo de amor, llene cada célula con amor, siente como se revitaliza y renueva.
Da gracias a Dios y al Arcángel Rafael por el don de sanación y del amor. Concéntrate y pídale a Dios que te sane y promete tener mas cuidado en el futuro de cuidar mas tu cuerpo.
Comienza a respirar pausadamente y dirige mentalmente la respiración a través de todo el cuerpo, comenzando a relajar mediante la respiración la cabeza, el cuero cabelludo, los músculos faciales, las mandíbulas, etc. Luego pasas a relajar el cuello, cada una de las vértebras y así sucesivamente con cada parte del cuerpo. Dirige la respiración en la parte interna de tu cuerpo hasta lograr un nivel profundo de relajación.
Cuando estés en estado profundo de relajación, invoca la presencia de Arcángel Rafael y pídele que te sane de toda dolencia.
Oración al Arcángel Rafael:
AMADO ARCÁNGEL RAFAEL, MEDICO DE DIOS, TU QUE FUISTE ENVIADO POR EL PADRE CREADOR A CURAR LOS MALES DE LA HUMANIDAD, TE IMPLORO PARA QUE CURES MIS DOLENCIAS, CÚBREME CON TU AMOROSA PRESENCIA, CON EL PODEROSO MANTO DE LA LUZ, Y LA SALUD PERFECTA.
MI CUERPO FUE CREADO PERFECTO, DEVUÉLVEME LA PERFECTA ACTIVIDAD DE CADA ÓRGANO, DE CADA CÉLULA DE MI CUERPO Y MENTE.
GRACIAS AMADO RAFAEL POR CURARME. AMEN
A continuación visualiza una corriente de energía de luz curativa de Dios y del Arcángel Rafael, una luz brillante, de color verde esmeralda rodeando tu cuerpo y alrededor de cada órgano. Siente como la energía entra a tu corriente sanguínea a cada nervio, llevando la energía de la curación.
Imagina como la luz le inyecta vitalidad y dinamismo a tu sistema inmunológico, siente como los leucocitos se dirigen veloz a curar el órgano enfermo, a esa parte de tu cuerpo que no funciona, según la perfección divina de la Creación.
Visualice como la luz curativa llega hasta la parte enferma y la llena de luz verde, la penetra y la envuelve. Concéntrate en ese órgano que esta enfermo, llénelo de amor, llene cada célula con amor, siente como se revitaliza y renueva.
Da gracias a Dios y al Arcángel Rafael por el don de sanación y del amor. Concéntrate y pídale a Dios que te sane y promete tener mas cuidado en el futuro de cuidar mas tu cuerpo.
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