ORACION ESENIA DICHA POR MARIA VIRGEN
Dentro del Altísimo, mi alma florece,
se regocija ante la vista del sendero ascendente.
Lo que está arriba se une con lo que está abajo,
y el Altísimo ha impregnado mi alma con su radiante mirada.
De todas las generaciones, la mía ha sido bendecida,
porque el Todopoderoso hizo grandes cosas por mí,
impregnó mi alma con su rayo.
Sagrado es su nombre, a través de los siglos su bendición se extiende
a todos aquellos que, por amor, siguen siéndole fieles.
Sublime e intocable es el Altísimo,
Todopoderosa es la fuerza de su brazo;
Él dispersa a los orgullosos, destruye a aquellos que sólo piensan en sí mismos,
derriba el trono de quienes sólo creen en su propio poder,
y eleva a su Reino a los corazones humildes, sencillos, puros y amorosos.
Regala sus dones a quienes permanecen en silencio ante su presencia.
El Altísimo nunca abandona a sus hijos que le sirven con sabiduría y amor.
Amén.
El Evangelio según San Lucas, 1.46,55.
Son palabras antiguas, una oración dicha por la Virgen María. No fue dicha por ella solamente, sino también por todas las mujeres encinta de la comunidad esenia. Actualmente, debemos estar conscientes de que la comunidad nazarena y esenia tenían enseñanzas comunales, enseñanzas para toda la humanidad, y que a la Virgen María no se le contemplaba como una mujer superior. Ella tenía responsabilidades importantes, pero no era considerada como una mujer distinta de las otras. Todas las mujeres gestantes eran respetadas y practicaban las mismas enseñanzas que la Virgen María.
Texto Libro , de Olivier Manitara.
Imagen no pude encontrar el autor,si alguien sabe agradeceré me lo diga
y el Altísimo ha impregnado mi alma con su radiante mirada.
De todas las generaciones, la mía ha sido bendecida,
porque el Todopoderoso hizo grandes cosas por mí,
impregnó mi alma con su rayo.
Sagrado es su nombre, a través de los siglos su bendición se extiende
a todos aquellos que, por amor, siguen siéndole fieles.
Sublime e intocable es el Altísimo,
Todopoderosa es la fuerza de su brazo;
Él dispersa a los orgullosos, destruye a aquellos que sólo piensan en sí mismos,
derriba el trono de quienes sólo creen en su propio poder,
y eleva a su Reino a los corazones humildes, sencillos, puros y amorosos.
Regala sus dones a quienes permanecen en silencio ante su presencia.
El Altísimo nunca abandona a sus hijos que le sirven con sabiduría y amor.
Amén.
El Evangelio según San Lucas, 1.46,55.
Son palabras antiguas, una oración dicha por la Virgen María. No fue dicha por ella solamente, sino también por todas las mujeres encinta de la comunidad esenia. Actualmente, debemos estar conscientes de que la comunidad nazarena y esenia tenían enseñanzas comunales, enseñanzas para toda la humanidad, y que a la Virgen María no se le contemplaba como una mujer superior. Ella tenía responsabilidades importantes, pero no era considerada como una mujer distinta de las otras. Todas las mujeres gestantes eran respetadas y practicaban las mismas enseñanzas que la Virgen María.
Texto Libro , de Olivier Manitara.
Imagen no pude encontrar el autor,si alguien sabe agradeceré me lo diga
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